En el caso de San Carlos del Valle y Alhambra, donde las restricciones no vienen motivadas por la cifra de casos de COVID-19, si no por depender sanitariamente del Hospital ‘Virgen de Altagracia’, unos asumen la situación y otros esperan flexibilidad en la aplicación de las medidas.
El alcalde cristeño, José Torres, explicaba a Onda Cero que ha notificado personalmente el cierre al sector de la hostelería y, a lo largo del día, hará público un bando informando con detalle a la población.
Por su parte, el alcalde de Alhambra, Luis Santos, insiste en recordar que este municipio tiene cero casos de la enfermedad del coronavirus y espera que esto se valore para no perjudicar sin motivo.
Para el alcalde de Manzanares, Julián Nieva, las restricciones tomadas con estos datos “alarmantes y preocupantes” suponen un esfuerzo más que debe asumir su población, a quien pide su cumplimiento estricto, aunque reconoce que esto supone altos niveles de sacrificio.
Nieva, que se ha mostrado esperanzado en revertir la situación, ha puesto en valor el trabajo de los servicios esenciales, con especial hincapié en sanitarios y socio-sanitarios.
La Solana es el único municipio que ya contaba con experiencia en este confinamiento perimetral. Su alcalde, Luis Díaz-Cacho, reconoce que los datos justificaban la decisión del Gobierno regional y, aunque han mejorado, todavía son muchos los contagios por la enfermedad del coronavirus.
Díaz-Cacho, que ha hecho un nuevo llamamiento a la responsabilidad de los solaneros para que dentro de diez días no se prorrogue la situación, destaca como fuerzas de seguridad y vecinos han sido todo un ejemplo de como aplicar el cierre de la localidad.