Los ganaderos de la provincia de Ciudad Real reivindican su papel en la prevención de incendios forestales, recuerdan que el pastoreo de ovejas y cabras ayuda a mantener limpio el campo y el monte.
Influye de forma negativa en estas labores el descenso significativo de animales, sobre todo cabras debido al alto número de sacrificios provocado por la tuberculosis, y el abandono del sector por las pérdidas económicas que sufren quienes se dedican a esta actividad y la falta de relevo generacional. Como señala, en declaraciones a Onda Cero, José García de Mateos.
El ganadero de Valdepeñas recuerda que, por ejemplo, en la zona de Malagón, donde en estos momentos el fuego está ocasionando importantes daños, se han perdido muchas cabezas de caprino que pastaban en esos lugares.
García de Mateos también señala que existen otros lugares del monte en los que, por razones económicas o medioambientales, se tiene prohibido el paso de los rebaños de ganado.
En el complejo contexto actual, cuando los incendios forestales están afectando a diferentes puntos la provincia, los ganaderos ciudadrealeños defienden que sacar a pastar a sus animales, en combinación con la limpieza del monte, es una forma de controlar este tipo de sucesos que provocan perjuicios económicos y destrozan el medio natural.