En el mes de marzo del pasado año se localizó el cadáver de una mujer de nacionalidad rumana en el local 'Copacabana', un local que regentaba en la localidad madrileña de Coslada. El cuerpo sin vida de la mujer presentaba evidentes signos de haber sufrido una muerte violenta, tras ser golpeada con varios objetos y haber sido agredida sexualmente.
Aunque la ausencia de testigos directos dificultó exponencialmente la investigación, en un mes los agentes centraron sus investigaciones en dos hermanos de nacionalidad rumana que eran residentes en la misma localidad del crimen. El pasado mes de septiembre uno de ellos era detenido en Alcalá de Henares.
Respecto al otro hermano, los investigadores comprobaron que días después del crimen abandonó España con destino a Rumanía. Desde ese momento se pusieron en marcha todos los mecanismos europeos de colaboración policial internacional a través de Interpol y, a principios del presente año fue localizado y arrestado en la localidad de Petrea (Rumanía). De esta forma, el crimen ha quedado totalmente esclarecido para la Policía.
Tras su detención, agentes de la Jefatura Superior de Policía de Madrid se desplazaron hasta Moisei (Rumanía) y participaron en el dispositivo y en las diligencias policiales de entrada y registro, donde se localizaron diversos y efectos y prendas de vestir que le incriminaron en los hechos.
Finalizadas todas las investigaciones, las autoridades judiciales de ese país europeo autorizaron la extradición del detenido a territorio nacional y, una vez en España, el juez correspondiente ha ordenado su ingreso en prisión.
La investigación ha sido llevada a cabo por agentes de la Brigada Provincial de Policía Judicial pertenecientes a la Jefatura Superior de Policía de Madrid, con la colaboración de Interpol y la oficina Sirene de la Policía Nacional así como funcionarios de la Agregaduría de Interior de la Embajada Española en Rumanía y agentes del servicio de investigación criminal de Maramures de la Policía de Rumanía.