El Ayuntamiento de Madrid conservará las medidas principales aplicadas en años anteriores para el dispositivo especial de seguridad de las preúvas, la Nochevieja y la tradicional carrera de San Silvestre, incorporando refuerzos adicionales para la prevención de incidentes.
Así lo ha dado a conocer tras la junta de Gobierno la vicealcaldesa de Madrid, Inma Sanz, detallando que, este año, el dispositivo hará “un especial hincapié en la seguridad, en la prohibición de entradas con objetos peligrosos, el control de la venta ambulante y la prevención de hurtos”.
Antes de cada evento, la Puerta del Sol, a la que podrán acceder un máximo de 15.000 personas, será completamente desalojada y el acceso estará controlado a través de cuatro puntos principales situados en las calles Mayor, Arenal y Alcalá y la Carrera de San Jerónimo, con un sistema de doble control, con prefiltros y filtros policiales.
Según ha detallado Sanz, en el operativo participarán 250 agentes de Policía Municipal cada uno de los días, trabajando en coordinación con la Policía Nacional.
Además, se habilitará un Centro de Coordinación Operativa (CECOR), que reunirá a todos los servicios de emergencia en una sala conjunta para supervisar el evento en tiempo real.
Por otro lado, para reforzar la vigilancia, se utilizarán drones, que permitirán monitorear los alrededores de la plaza y anticipar posibles incidentes.
También habrá un despliegue de efectivos del Samur-Protección Civil, con 50 profesionales por jornada, tres unidades de soporte vital básico, dos de soporte vital avanzado y vehículos de apoyo logístico.
Asimismo, los Bomberos de Madrid tendrán un retén en la zona para actuar en caso de emergencia, y el servicio de limpieza SELUR estará preparado para intervenir.
La edil ha subrayado que los dispositivos para las cabalgatas de Reyes, tanto de los distritos como la que recorrerá el centro de la ciudad, ya están también diseñados, aunque faltan por perfilar algunos detalles.
