La campaña de caza arrancó este pasado jueves, 12 de octubre y se dilatará hasta el 6 de enero pero no logrará erradicar el problema de sobrepoblación de animales en nuestros campos. Los agricultores piden soluciones inmediatas y los cazadores aseguran que el exceso de burocracia todavía pone las cosas más difíciles.
En la provincia de Castellón hay 13.000 licencias de caza, pero la campaña de caza no será suficiente para acabar con la superpoblación como es el caso del Desert de les Palmes donde se han contabilizado 1.300 ejemplares de jabalí en apenas 2.000 hectáreas, es decir 40 ejemplares por hectárea cuando lo normal son 4 por esta superficie. El problema se repite en todo el litoral.
Mientras, las asociaciones agrarias piden políticas efectivas contra los animales salvajes y un plan de choque mediante campañas de esterilización e incentivos a la carne de caza.
La proliferación de conejos, corzos, buitres y jabalíes arrasa los cultivos. Esta semana la presidenta de la Diputación, Marta Barrachina se ha reunido con la Federación de Caza y ambas entidades se han comprometido a buscar soluciones al respecto.