Los seis galardonados en la 34 edición de los Premios Rei Jaume I reiteran que son necesarios más recursos para que la ciencia y los investigadores cuenten en España con el respaldo inversor que se da en la actualidad en otros países.
Afirman que en España hay mucho talento pero muchos investigadores, dadas las circunstancias económicas actuales, empiezan a plantearse desarrollar sus proyectos en otros países. A ello dicen hay que sumar que en los últimos veinte años no se han intentado resolver las carencias de los sistemas de gestión que consideran no son los adecuados debido a una falta de organización.
La valenciana Ángela Pérez, Premio Jaume I al Emprendedor, considera que además de apostar por una ley de mecenazgo se debe compensar fiscalmente a aquellos que quieran invertir en ciencia y que las medidas se sostengan en el tiempo.
En cuanto a la colaboración público-privada Antonio de Lacy, Premio Jaume I en Investigación Médica, apuesta por el concepto de sanidad “que nos merecemos” y reitera que en ámbitos como éste es precisamente donde las inversiones privadas más interésmuestran pero no se está facilitando su entrada.
Situación superficie forestal
Por otra parte Emilio Chuvieco, Premio Rei Jaume I en Protección Medio Ambiente, ha advertido del incremento de la superficie forestal en las últimas tres décadas en España como consecuencia del abandono de las actividades agrícolas tradicionales. Una situación que considera es parte del problema de los incendios en la actualidad al haber una mayor densidad de vegetación.
Reconoce que la prevención sigue siendo fundamental pero reitera hay incendios que no se pueden evitar cuando las condiciones meteorológicas son adversas.
El resto de premiados son Jesús María Sanz, premio en Investigación Básica; Marta Reynal, premio en Economía; y Montserrat Calleja, premio en Nuevas Tecnologías.