Este 28 de marzo se cumplen 80 años desde la muerte de Miguel Hernández. El poeta de la libertad murió privado de ella, en prisión. Desde prisión y pese a la muerte de su primer hijo, en 1938, el escritor oriolano siguió escribiendo Cancionero y romancero de ausencias, su última obra, un libro inacabado y póstumo.
Si bien a Miguel Hernández se le conmutó la pena de muerte, fue condenado a treinta años de prisión. En la cárcel contrajo tuberculosis y, a los 31 años, murió el 28 de marzo de 1942, sin haber recuperado la libertad por la que tanto había luchado.
La ley de memoria histórica de 2007 anuló también, junto a la de tantos otros, la condena al poeta de Orihuela, el mayor artista que ha dado la Vega Baja y uno de los más reconocidos en el ámbito nacional.
(…) Porque donde unas cuencas vacías amanezcan,
ella pondrá dos piedras de futura mirada
y hará que nuevos brazos y nuevas piernas crezcan
en la carne talada.
Retoñarán aladas de savia sin otoño
reliquias de mi cuerpo que pierdo en cada herida.
Porque soy como el árbol talado, que retoño:
porque aún tengo la vida.
MIGUEL HERNÁNDEZ, El hombre acecha, (1938-39)
Durante toda esta jornada del 28 de marzo, la casa Museo de Miguel Hernández en Orihuela permanecerá abierta (Casa Viva), con talleres infantiles y visitas guiadas a los Colegios y un Concierto Homenaje de la oriolana María Sabater. Los Murales de San Isidro se celebrarán el mes de mayo.
Entre otros reconocimientos, el poeta oriolano tiene el honor de dar nombre a la Universidad Miguel Hernández de Elche, que en este año 2022 celebra su 25 aniversario.