'Sempervirens simboliza, en este momento, la esperanza de iniciar un nuevo tiempo. La esperanza de dejar atrás el túnel pandémico e iniciar una etapa de recuperación personal y emocional; social, económica y de la convivencia', ha relatado Iñigo Urkullu, para quien 'miramos al futuro con esperanza, sin olvidar la experiencia pasada y la solidaridad con quienes más han padecido'.
Parque sémpervirens
El espacio se concibe como un lugar de recogimiento, silencio e interiorización. Una gran sequoia gigante plantada en 1860, que se secó en 2014, simboliza la fuerza y solidez que, según Urkullu 'representa la permanencia de la memoria colectiva'. Junto a ella, una nueva sequoya de la variedad sémpervirens simboliza el nuevo tiempo.
El parque Sémpervirens de Vitoria se convirtió hace un año en el primer espacio de recuerdo a las víctimas de la pandemia, y en su inauguración el lehendakari se comprometió a realizar un acto de recuerdo cada año. También pidió a los alcaldes que dedicarán espacios de homenaje en sus municipios.