Encuesta fundación Eroski

Más del 60% de escolares de primaria come frente a pantallas

Más del 60% de niños de escolares de primaria, de entre 8 y 12 años, de las comunidades autónomas de la zona norte de España comen frente a pantallas, lo que "afecta a sus hábitos alimentarios", según la 'Encuesta sobre Hábitos de Alimentación a Escolares de Primaria' de la Fundación Eroski.

Europa Press

San Sebastián |

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Niña ante pantalla | Guía Infantil

Según esta encuesta a más de 2.000 escolares de entre 8 y 12 años, "el 92% de las niñas y niños encuestados afirma que su opinión se tiene en cuenta a la hora de hacer la lista de la compra familiar", así "casi la mitad acompañan siempre a sus padres a hacer la compra (45%) y la otra mitad solo a veces".

En cuanto a la cocina, "el 82% de los menores asegura colaborar, al menos ocasionalmente, en la preparación de las comidas"; aunque en el País Vasco "ese porcentaje desciende al 72%".

Por otro lado, "el 90% de los escolares encuestados dice realizar cinco comidas diarias", aunque, "de media, un 10% reconoce no merendar. Por otro lado, el desayuno (18%) y la merienda (25%) son las comidas que más frecuentemente realizan en soledad". El director de la Fundación Eroski ha lamentado que ese hábito "no es positivo", ya que "las comidas no solo cumplen una función nutritiva, sino también social, y la falta de compañía suele derivar en un mayor uso de pantallas". En el caso de Euskadi, "el 95% de las y los menores declaran que meriendan habitualmente y, además, un 44% lo hace en la escuela".

Respecto al consumo de bebidas y alimentos poco saludables, ha indicado que pese a que el 94% de los menores consultados consume agua como bebida principal durante las comidas, un 27% bebe, además, zumos, un 19% refrescos y un 22% otras bebidas sin gas. En este contexto, Martínez ha señalado que existe "una idea distorsionada, a veces, de lo que es saludable y lo que no", como, por ejemplo, tomar zumos en las comidas, aunque sean naturales, por los azúcares.

Además, el 92% de los escolares encuestados reconoce comer semanalmente hamburguesas, pizzas, perritos calientes y/o patatas fritas, y un 44% también consume bollería y/o dulces más de tres veces por semana. Martínez ha explicado que estos productos, aunque están "normalizados" en la dieta cotidiana de los menores, "son de consumo recomendado ocasional por las personas expertas en la materia debido a su alta densidad calórica y a su aportación de grasas, muy a menudo saturadas -las menos saludables-, azúcar o sal, nutrientes cuyo exceso en la dieta incide en las elevadas tasas de sobrepeso y obesidad infantil".

Los menores en el País Vasco muestran un consumo ligeramente inferior de refrescos (16%) y alimentos poco saludables (89%) en comparación con otras regiones.