Un equipo de investigadores ha constatado que la rotación del núcleo de la Tierra podría estar invirtiéndose tras haberse detenido recientemente. Los resultados de la investigación han sido publicados en la revista Nature Geoscience, donde los científicos afirman que están "sorprendidos" ante los "pequeños cambios" en las observaciones geofísicas realizadas sobre la superficie terrestre.
Concretamente, en el campo magnético o el aumento o la disminución de la duración de los días. Esto, sumado a otros indicios, ha llevado a los investigadores a esclarecer algunos de los misterios que rodeaban las profundidades de la Tierra, como el papel que desempeña el núcleo interno a la hora de mantener el campo magnético o la velocidad de rotación, que está relacionada con la propia duración de los días.
La noticia ha generado mucha polémica en el mundo de la ciencia, puesto que esto ha sido objeto de debate durante muchos años y numerosos expertos entienden que las conclusiones están siendo "muy alarmistas", mientras que otros ponen el foco en la mayor complejidad que entraña entender el comportamiento del núcleo de la Tierra a raíz de este informe.
¿Qué pasa si se detiene el núcleo de la Tierra?
Para empezar, cabe recordar que el núcleo interno de la Tierra es una bola caliente y densa de hierro sólido situada a más de 5.000 kilómetros de profundidad, siendo el lugar más inaccesible de nuestro planeta, que está formado por cuatro capas: corteza, manto, núcleo externo y el propio núcleo interno.
Esta última capa, la más profunda, está rodeada por un núcleo externo líquido, lo que le permite girar de forma distinta a la rotación de la Tierra. Así, su giro es impulsado por el campo magnético generado en el núcleo externo y equilibrado por los efectos gravitatorios presentes en el manto.
Que el núcleo se detenga puede influir en la duración de los días, como afirma el Instituto de Geociencias CSIC-UCM. "Lo que la nueva investigación afirma es que el núcleo ha decrecido su velocidad y está desacompasado con la velocidad de giro del resto del planeta. Es como si nosotros (la corteza) nos adelantáramos respecto al núcleo (...) El efecto de este desacoplamiento podría influir en la duración de los días, que no siempre ha sido igual en la historia de la Tierra", afirma el IGEO en un hilo en su cuenta de Twitter.
En el mismo hilo, se menciona que serán necesarios varios años para confirmar la hipótesis de este estudio, aunque también concluye que el núcleo es "más complejo" de lo que se pensaba, así como "más heterogéneo" y con posibilidad de tener mayor influencia en la superficie, además del campo magnético, como se sostenía hasta ahora.