Eurotunnel anunció hoy que reclama una indemnización de 9,7 millones de euros a la comisión intergubernamental franco-británica que supervisa la conexión entre los dos países por el túnel ferroviario por los problemas que le causan los inmigrantes irregulares que tratan de pasar a Inglaterra.
En un comunicado de presentación de sus resultados del primer semestre, Eurotunnel indicó que las perturbaciones en el tráfico de trenes y los gastos en seguridad para proteger las instalaciones por la presión de los cientos de inmigrantes que tratan de atravesar de forma clandestina desde el puerto francés de Calais a Inglaterra le costó 13 millones de euros en ese periodo.
El Gobierno británico se ha comprometido, por ahora, a abonarle 4,7 millones de euros en concepto de compensación a cuenta del ejercicio 2015, y la compañía que explota el túnel pide otros 9,7 millones a la comisión intergubernamental internacional. Para esa petición de indemnización se basa en el Tratado de Canterbury, que establece las condiciones de explotación, pero también en la jurisprudencia.
En los últimos meses, Eurotunnel ha tenido que interrumpir la circulación de trenes en varias ocasiones por la infiltración de inmigrantes que tratan de subirse a los convoyes, algunos de los cuales han muerto en el intento.
De hecho, el pasado día 7, tras descubrirse que un grupo de sin papeles se había colado en las instalaciones de la empresa, se encontró el cadáver de uno de ellos en un tren que transportaba camiones. Y el pasado 26 de junio, un eritreo que se había introducido en el complejo ferroviario murió cuando trataba de subir a un tren en marcha.