No cede Nadia Calviño en sus posiciones aunque le queden pocos días para abandonar el Ministerio de Economía rumbo al Banco Europeo de Inversiones (BEI) y antes de irse quiere dejarlo todo bien atado.
Su último encontronazo con Yolanda Díaz es a cuenta del impuesto a la banca y energéticas, dos tributos que nacieron con carácter temporal y que han recaudado menos de lo previsto: 2.900 millones de euros. La intención era mantenerlos, pero Calviño ha dejado claro este viernes en 'Espejo Público' que las cosas han cambiado.
"Creo que fue una buena decisión, igual que ahora me parece que es el momento de revisar y ver si hay que ajustar algunos de los parámetros en el nuevo escenario en el que estamos", explicaba Calviño.
Discrepa Yolanda Díaz con este replanteamiento y exige a los socialistas que respeten lo acordado en el pacto de coalición PSOE-Sumar. "Esto está en el acuerdo de gobierno. Sí, vamos a seguir defendiendo el mantenimiento del impuesto a las entidades financieras y, por supuesto, a las entidades energéticas", decía la ministra de Trabajo.
Existe también un evidente desencuentro en cuanto al subsidio de desempleo. Díaz acusa a Calviño de querer recortar la prestación con una reforma que compete solo al Ministerio de Empleo.
Economía descarta rebajas en el subsidio. "Se trata de modernizarlo", dice Calviño, con una reforma transversal que depende de varios departamentos.
