Rocío Monasterio es la voz femenina de Vox, que lidera la formación en Madrid con "mano de hierro" pero con un perfil aparentemente sosegado y tranquilo. Monasterio se marca como objetivo frenar a la izquierda en Madrid y que los partidos progresistas no sumen. Para ello, se muestra muy crítica con todas las formaciones progresistas, pero sobre todo, con Unidas Podemos y con Pablo Iglesias.
La número uno de la lista de Vox se presenta como candidata para presidir la Comunidad de Madrid por segunda vez. En las elecciones de 2019 su candidatura consiguió 12 escaños y las encuestas auguran prácticamente el mismo resultado para la formación de Abascal el 4M, que quedaría por delante de Unidas Podemos y de Ciudadanos, que no obtendría el 5 % de los votos necesarios para tener representación en la Asamblea.
En esta ocasión, Monasterio cuenta con más experiencia política, tras ocupar la portavocía de su grupo parlamentario en la Asamblea y siendo socia en la investidura del gobierno de coalición de PP y Ciudadanos.
Monasterio, una de las dirigentes más duras de Vox
La candidata a las elecciones de Madrid es una de las dirigentes del "núcleo duro de Vox" y encarna el alma ultracatólica y ultraconservadora del partido. Monasterio no oculta su animadversión hacia Pablo Iglesias, al que llegó a decirle que se marchara de España en un debate electoral, porque eso era lo que querían todos los españoles.
También se ha posicionado claramente en contra del aborto y en contra de "movimientos feministas radicales", está en sintonía con las posiciones de la asociación HazteOír y es habitual su discurso en contra de los menores extranjeros no acompañados o la negación del cambio climático.
Casada con Iván Espinosa de los Monteros
Defensora del matrimonio tradicional, Monasterio está casada con Iván Espinosa de los Monteros, portavoz del Grupo Parlamentario de Vox en el Congreso de los Diputados, con quien tiene cuatro hijos.
Rocío Monasterio nació en Madrid, el 4 de febrero de 1974 y es hija de cubano de ascendencia asturiana y madre española. Su familia salió de Cuba al expropiarle sus negocios el régimen comunista. La candidata de Vox estudió en el Colegio Santa María del Camino en Madrid y estudió Arquitectura en la Universidad Politécnica de Madrid. Hasta 2009 no obtuvo la titulación de Arquitecta.
La candidata de Vox en Madrid cuenta entre sus aficiones: dibujar, tocar la guitarra y pasar tiempo en familia. Además, le gusta montar en bici o surfear en el Cantábrico.
Trayectoria política
Monasterio se afilió a Vox en 2014 y en 2016 fue elegida presidenta de Vox en Madrid, puesto que sigue ostentando. Su entrada en las instituciones se produjo en 2019, como diputada en la Asamblea de Madrid. Dentro del Comité de Acción Política del partido es responsable del desarrollo del programa de Asuntos Sociales: ponencia de familia, violencia de género, igualdad, defensa de la vida, custodia compartida e inmigración.
Además de su actividad en VOX, fue fundadora de la Plataforma por las Libertades, entidad dedicada a combatir la imposición de la ideología de género, y del Foro Generación del 78, una asociación que tiene como objeto promover el libre intercambio de idas con personalidades vinculadas al ámbito político, económico, empresarial, social y cultural. Colabora también con la Fundación Renacimiento Demográfico y con la Fundación Madrina, que se dedica a ayudar a mujeres embarazadas y familias con niños en riesgo de exclusión y en situación de crisis, soledad, abandono o violencia.
Campaña marcada por la crispación
Bajo el lema electoral, 'Protege Madrid. Vota seguro', Vox inició la campaña electoral intentando diferenciarse de Ayuso para conseguir votos del PP y centrando la atención y agitando polémicas que han aumentado la crispación y la tensión política.
Abascal se ha implicado en la campaña electoral de Monasterio de manera directa y ha estado presente en muchos actos electorales, como el que tuvo lugar en la 'Plaza Roja' de Vallecas, donde se produjeron disturbios.
Estos disturbios fueron el inicio de una campaña polarizada y crispada, que fue en aumento tras la colocación de un cartel electoral de Vox en contra de los menores extranjeros acompañados, en el que la formación de Abascal denunciaba que estos menores reciben más dinero al mes que los jubilados.
Tras la última polémica protagonizada por Rocío Monasterio en un debate electoral por las cartas amenazantes con cartuchos de balas enviadas al candidato de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, los candidatos de los partidos de izquierda se negaron a debatir más con Vox en lo que quedaba de campaña y pidieron un "cordón sanitario a Vox".
Expectativas electorales
Con su carácter marcado pero de formas educadas, Monasterio busca movilizar al votante de derechas y hacer que se decante por votar a Vox en contraposición de Ayuso y así conseguir ser clave en un futuro gobierno de derechas en la Comunidad.
La mayoría de las encuestas vaticinan que Vox obtendría un resultado parecido al de 2019, cuando consiguió 12 escaños. Estos escaños serían decisivos según los últimos sondeos para que Isabel Díaz Ayuso pudiera gobernar en la Comunidad de Madrid.
Por su parte, Ayuso ha manifestado en varias ocasiones que su objetivo y por lo que convocó elecciones anticipadas era para garantizar un gobierno de "libertad" en Madrid y eso solo es posible si consigue mayoría absoluta, pero no ha cerrado la puerta a un posible pacto con Vox para poder gobernar, aunque en público no se pronuncia sobre ello.