Este martes todos los senadores de Estados Unidos aprobaron por unanimidad acabar con el cambio de hora en verano y en invierno, medida adoptada hace décadas con el objetivo de maximizar el ahorro energético.
La medida, que entraría en vigor en noviembre de 2023, haría permanente el horario de verano y los ciudadanos estadounidenses dejarían de cambiar la hora dos veces al año. Esta iniciativa, sin embargo, tiene que ser ratificada por la Cámara de Representantes.
Los beneficios del horario de verano: más luz y menos criminalidad
Durante el debate en la Cámara Alta, el senador republicano Marco Rubio, impulsor del proyecto de ley, calificó de "estupidez" el cambio de hora y opinó que "la mayoría de estadounidenses quieren dejar de adelantar y atrasar" el reloj.
Rubio reivindicó que el horario de verano permite "pasar más tiempo al aire libre durante las tardes", porque hay más luz solar, además de que, a su juicio, se reduce la criminalidad.
Tiempo de adaptación hasta noviembre del 2023
Al redactar el texto, el senador acordó con el sector del transporte ferroviario, las aerolíneas y las cadenas de televisión la entrada en vigor de esta medida a partir de noviembre de 2023 para que tengan tiempo de adaptarse.
En algunas zonas amanecería a las 9:00h
Sin embargo, el fin del cambio de hora conllevará amaneceres más tardíos. Este debate parlamentario ha continuado en las redes sociales, donde muchos han recordado que en algunas ciudades de Estados Unidos situadas en los extremos occidentales de los tres husos horarios del país, amanecerá muy tarde, alrededor de las nueve de la mañana.
En concreto, Detroit vería la luz a las 9:01 horas y en Indianápolis, capital de Indiana, amanecería a las 9:06 de la mañana.
Estados Unidos entró en horario de verano el pasado fin de semana y regresará al horario de invierno el próximo noviembre, un cambio que se realiza desde principios del siglo XX en buena parte del mundo para ahorrar energía.
