Según ha confirmado la delegada del Gobierno en Palermo, Francesca Cannizzo, los 51 cadáveres hallados ayer en la bodega del pesquero en el que viajaban junto con otros 439 refugiados serán trasladados al cementerio del municipio.
Antes de ser enterrados, serán sometidos a un examen forense para intentar determinar cuáles han sido las causas de su fallecimiento y si se confirma la hipótesis que apunta a que habrían muerto por asfixia y por inhalar los gases que emitía el motor de la embarcación.
"Esperamos que los exámenes forenses nos ayuden a reconstruir los hechos para conocer exactamente lo que ocurrió a bordo de la embarcación", explicó Cannizzo.
A Palermo también han llegado los 439 socorridos con vida en esta embarcación y otros 130 que la nave "Poseidón" había salvado previamente en otra operación de rescate efectuada también ayer.
Estas 569 personas serán primero atendidas por el personal sanitario en el puerto de Palermo y posteriormente trasladadas a centros de acogida del país, dado que los centros de Sicilia están desbordados por la masiva llegada de refugiados a diario.
La Fiscalía de Palermo ha abierto una investigación para buscar "responsabilidades penales por esta nueva tragedia", para lo que escuchará el testimonio de los rescatados, aseguró Cannizzo.
La Guardia Costera informó ayer del hallazgo de estos 51 cuerpos sin vida hacinados en la bodega de un pesquero y que fueron descubiertos cuando el personal de la nave sueca inició las labores de rescate de esta embarcación, que se encontraba a la deriva.
Es un drama similar al que ocurrió el pasado 15 de agosto, cuando fueron encontrados 49 cadáveres en otra bodega de otro barco.
Los guardacostas italianos confirmaron ayer que 2.800 inmigrantes fueron salvados en diversas operaciones desplegadas en el Mediterráneo en una sola jornada, y recuperados 55 cadáveres.
Hoy fueron asistidas 485 personas en cuatro operaciones en las aguas del Canal de Sicilia.
