Los jueces consideran que Falciani ha cometido un delito de violación de secreto comercial, pero le han absuelto del cargo relativo a la sustracción de datos que había presentado el fiscal.
El exinformático, que actualmente vive en Francia y desde donde no puede ser extraditado, no ha querido comparecer en el juicio porque "no confía en la justicia suiza".
Aún así, la sentencia no es definitiva y puede apelar al Tribunal Federal, la más alta instancia judicial del país helvético.
En el año 2008, Falciani reveló una lista de presuntos defraudadores fiscales, elaborada con los datos a los que tuvo acceso cuando trabajaba en la filial de la entidad, una información que transmitió a las autoridades francesas que luego compartieron con otros países con el objetivo de perseguir a los sospechosos de evasión.