¿Qué es la depresión postvacacional?
Llega septiembre y con él la vuelta de las vacaciones. Se acabó el verano y es momento para regresar a la rutina, los niños regresan al colegio y los mayores a sus trabajos. No siempre es fácil retomar los hábitos tras un período de ocio y descanso como son las vacaciones de verano. Es por eso que se está convirtiendo en un problema común el llamado síndrome de depresión postvacacional.
Se define este síndrome como el conjunto de síntomas que puede padecer un trabajador al reincorporarse a su puesto de trabajo. Estos consisten, principalmente, en: cansancio generalizado, dolor muscular y alteraciones del sueño y del apetito. Además de ir acompañado de falta de motivación, tristeza e irritabilidad.
Suele durar de 2 a 3 días a un máximo de 21 días hasta que la persona se vuelve adaptar a su nueva realidad. Cuando el malestar persiste en el tiempo puede generar trastornos de ansiedad y/o depresión. Diferentes estudios señalan que entre un 25 y un 30% de los trabajadores van a padecer este síndrome post-vacacional.
Motivos que influyen en su aparición
- Un trabajo poco estimulante: Si la persona no se encuentra a gusto en su puesto laboral, las posibilidades de que padezca síndrome postvacacional aumentan de una manera increíble.
- Problemas de acoso laboral: También conocido como mobbing, consiste en machacar a un trabajador psicológicamente, a través de constantes menosprecios a su trabajo de una forma continuada. Otra forma es discriminar a un trabajador por algo que poco o nada tiene que ver con el desempeño de su trabajo.
- Malas rutinas durante las vacaciones: Es normal que durante este periodo de descanso comas a deshoras, te acuestes más tarde, te levantes cuando ya no tengas más sueño y dejes tus obligaciones a un lado. Todo eso está muy bien, pero si alargas ese estilo de vida hasta el momento de reincorporarte a tu puesto laboral, el shock de volver a la rutina te puede llevar a un estado de depresión.
Consejos para poder combatirlo
Las personas que hayan finalizado ya su periodo vacacional y noten el malestar o el conjunto de síntomas propios del síndrome vacacional, pueden seguir una serie de recomendaciones para salir de él lo antes posible:
- Regresar unos días antes al lugar de residencia habitual: Apurar los días de vacaciones hasta el último día puede ser muy atractivo pero, también podría hacer más pesado y difícil el regreso al mundo laboral.
- Normalizar el horario de manera progresiva: Cuando estamos de vacaciones uno de los mayores placeres es poder dormir más. Volver al trabajo implica cumplir horarios. Por ello, es aconsejable regularlo unos días antes de volver al trabajo.
- Regularizar tu agenda laboral priorizando lo más inmediato: Saber organizarse siempre es necesario y a la vuelta de las vacaciones más que nunca. En caso de no poder finalizar las tareas pendientes te recomiendo anotarlas en una lista y así realizarlas en cuanto te sea posible. De este modo, evitarás que dándole vueltas en tu cabeza te roben la energía y te hagan sentir más agotado.
- Permítete no llegar a hacerlo todo aceptando imprevistos, así como cometer errores: Truco indicado para los sujetos del tipo 1: los planificadores.
- Cada día elige por la mañana que pequeña cosa afrontarás como si te sintieras muy seguro de que todo va a salir bien: Indicado para las personas más fóbicas y controladoras.
Todas estas estrategias te ayudaran a abordar el regreso de mejor manera y lograrás que no solo disfrutes en tus vacaciones, sino también en el resto del año. Pero si ves que te cuesta y los síntomas aumentan o no desaparecen, busca ayuda profesional.