Madrid |
Cien mil metros cuadrados en Ifema divididos en una zona azul para Naciones Unidas y otra verde para la Sociedad Civil. Se esperan veinte mil participantes y se ha habilitado una central hotelera.
Habrá actividades por todo el eje Atocha-Castellana, pero no se va a cortar el tráfico. No hay estimaciones de costes, pero se espera que de media esta cumbre cueste 60 millones de euros y deje unos beneficios de cien millones.
Es una oportunidad para España, como dice Teresa Ribera, ministra de Transición Ecológica: "Es también una fantástica oportunidad para que España y su sociedad redimensione, reposicione y vuelva a identificar con mayor corrección qué se entiende por progreso, prosperidad y desarrollo".
La Casa Real ha mostrado su interés por participar en la Cumbre. Sin embargo, la activista medioambiental, Greta Thunberg, en principio no vendría, aunque podrá participar a través de vídeoconferencia.