Consejos para evitar el estrés laboral
Esta patología está impulsada por una carga de trabajo excesiva, presión por cumplir objetivos o largas jornadas laborales, unido a la falta de descanso o desconexión. Además, los riesgos asociados a esta enfermedad van más allá de lo emocional (depresión, ansiedad o tensión), afectando también al organismo a nivel físico.
El frenético ritmo de vida, especialmente en el entorno laboral, hace que cada vez sean más los trabajadores que sufren estrés. Esta patología está impulsada por una carga de trabajo excesiva, presión por cumplir objetivos o largas jornadas laborales, unido a la falta de descanso o desconexión. Además, los riesgos asociados a esta enfermedad van más allá de lo emocional (depresión, ansiedad o tensión), afectando también al organismo a nivel físico.
Para revertir los efectos negativos del estrés o tratar de minimizar las posibilidades de padecerlo, los expertos de Sanitas han elaborado un listado de consejos para evitar que el estrés laboral desemboque en enfermedades más graves:
- Realizar actividades físicas: El ejercicio, practicado de forma regular, es una de las mejores terapias para combatir el estrés. Al hacer deporte el organismo segrega endorfinas, que actúan como una morfina natural. Una vez producida esta molécula, se dispersa en el sistema nervioso central, en los tejidos del organismo y en la sangre. Los deportes de fondo son los que producen una mayor cantidad y ayudan a regular los picos de estrés: el running, las rutas en bicicleta o la natación son algunas las actividades más recomendadas.
- Llevar una dieta sana y equilibrada: Una correcta hidratación y una dieta equilibrada donde predominen alimentos frescos y de temporada, como frutas y verduras, ayudará a regular el funcionamiento del organismo. Hacer cinco comidas al día e incluir alimentos como el limón, los anacardos o la avena es una gran terapia antiestrés. Asimismo, reducir la ingesta de alcohol tendrá un efecto positivo en el cuerpo evitando el estrés a largo
- Regular los horarios de sueño: La ausencia de una rutina de sueño puede derivar en problemas como la falta de concentración o la fatiga, que aumentan las posibilidades de sufrir estrés. Además, una incorrecta higiene del sueño tiene efectos negativos a nivel emocional, haciendo a las personas más proclives a sufrir estrés crónico.
- Desconexión laboral: No revisar el correo fuera de la oficina, evitar responder llamadas que no sean urgentes en el tiempo libre o no llevarse trabajo a casa los fines de semana son claves para que el cerebro desconecte de la actividad del día a día y sea más productivo en el horario laboral. De esta forma el cansancio psicológico tiende a reducirse, minimizando las posibilidades de sufrir estrés.
- Crear un ambiente de trabajo agradable: A lo largo de la semana, los trabajadores pasan de media cuarenta horas en su puesto de trabajo. Fomentar las relaciones interpersonales con los compañeros de oficina o tener el puesto de trabajo ordenado son solo algunos de los consejos para hacer que las tareas diarias sean más llevaderas. Sentirse a gusto en el lugar de trabajo minimizará el riesgo de sufrir episodios de estrés.