EN BUENAS MANOS

Dr. Garcia: “Los hábitos de vida saludables pueden evitar hasta el 80% de los infartos"

Con la puesta en marcha de la consulta de Cardiología en este hospital, gestionado por el grupo sanitario Ribera desde enero, el doctor García, que se define a sí mismo como “un cardiólogo clínico experto en empatizar con los pacientes”, considera importante que los pacientes identifiquen y controlen cuanto antes esos factores de riesgo, para prevenir posible accidentes cardiovasculares.

Redacción

Madrid | 10.06.2021 08:24

Dr. Garcia: “Los hábitos de vida saludables pueden evitar hasta el 80% de los infartos"
Dr. Garcia: “Los hábitos de vida saludables pueden evitar hasta el 80% de los infartos" | Redacción

El doctor Pablo García, cardiólogo del hospital Ribera Almendralejo, asegura que los hábitos de vida saludables “pueden llegar a evitar hasta el 80% de los infartos”. “Hay factores de riesgo cardiovascular que no podemos controlar, como la edad, el sexo o los condicionantes genéticos, pero sí que podemos intervenir en aquellos que dependen de nosotros y nuestros hábitos”, asegura.

Con la puesta en marcha de la consulta de Cardiología en este hospital, gestionado por el grupo sanitario Ribera desde enero, el doctor García, que se define a sí mismo como “un cardiólogo clínico experto en empatizar con los pacientes”, considera importante que los pacientes identifiquen y controlen cuanto antes esos factores de riesgo, para prevenir posible accidentes cardiovasculares. “El riesgo es una probabilidad de que un suceso determinado ocurra en un plazo de tiempo concreto”, explica, lo que aplicado al corazón supone “saber cuántas papeletas tengo para padecer un infarto o un ictus en un plazo de diez años, por ejemplo”. Y esas papeletas varían según el número y la intensidad de los factores de riesgo que tengamos.

Tal y como recoge Ribera Salud, los factores de riesgo cardiovascular clásicos, según el doctor García, son la hipertensión arterial, la diabetes, el tabaquismo y los niveles de colesterol altos. A estos hay que añadir los “factores implicados” como la obesidad, el sedentarismo, los trastornos del sueño, la polución o el tipo de dieta. Y recuerda que “hay factores que se pueden medir en analíticas de sangre con determinados marcadores, otros que se valoran a partir de pruebas de imagen, como el calcio coronario, y otras con pruebas de esfuerzo”. Lo más importante, añade, “es llevar un seguimiento clínico, sobre todo en determinados grupos de edad y a los pacientes que tienen uno o varios de los factores de riesgo antes comentados”.