Es noticia de los últimos días: las diversas agencias internacionales advierten que "se están generando las condiciones propias de un episodio de El Niño", este fenómeno meteorológico que trastoca un poco el clima en algunas regiones del planeta. Parece que este año 2023 puede ser un poco movido.
Nuestro experto en ciencia, Alberto Aparici, explica que El Niño no es un fenómeno "malo, ni destructivo, ni anómalo". Sino que es algo "perfectamente natural" que lleva concurriendo mucho tiempo y que lo más probable es que siga ocurriendo durante muchos milenios y que hay que estar "preparado para él".
El Niño no es nada más que un episodio de aguas calientes en toda la franja ecuatorial del Pacífico, el palabras de Aparici "como si se hubiera convertido en una piscina al sol". La consecuencia que puede traer este fenómeno es que las lluvias van a ser diferentes, se evapora más agua en América, llueve más en esos países y no llega tanta humedad a Asia, que vive una temporada mucho más seca.
En Europa, como comenta nuestro experto, el efecto es más pequeño y lo único que podríamos notar es la tormenta que se está "cocinando" en el Atlántico.
