Ángeles Caballero cuenta su experiencia en un museo cuya sede está en lo que antes era un piso piloto y después un centro de mayores. Se trata de un museo muy particular llamado Vicus Albus, el nombre en latín que tenía el distrito madrileño de Vicálvaro.
El museo recoge todo tipo de restos y hallazgos arqueológicos encontrados durante la construcciones de edificios y urbanizaciones. Al frente del museo está Valentín González, un vecino de Vicálvaro que trabajó durante años como policía municipal. Ángeles explica que allí descubrió que Vicálvaro fue hace 70 años un municipio independiente que contaba con su propio alcalde. Con motivo del 70 aniversario de la anexión de Vicálvaro con Madrid, Valentín preparará un crespón negro porque según él, eso supuso una pérdida para el distrito.
Además, entre otras curiosidades, en el museo se aprende que Vicálvaro es unos delos principales productores de un mineral llamado Sepiolita que se utiliza para la arena de los gatos.
