El maestro pastelero José González, de la confitería Nunos, fue el encargado de hacerle hace unos años un roscón a Leo Harlem con su cara y con relleno de crema tostada al ron con muselina a la vainilla bourbon.
"A cada obra de teatro le hicimos una simbología", recuerda y en ese momento el humorista y colaborador de Más de uno estaba con 'Hasta aquí hemos llegao'.
Asimismo, se pronuncia sobre la mayor polémica que rodea a los roscones. "El problema de la fruta escarchada es la de siempre, hay que poner fruta semiconfitada para que a la hora de meterlo en el horno no se seque", dice. Además, explica que simboliza las joyas de la corona y confiesa que también hacen algunos sin fruta escarchada.