En el programa de hoy, Santi García Cremades nos lleva hasta Bolonia, Italia, en el año 1535. Allí, los matemáticos Antonio María del Fiore y Niccolo Fontana, de apodo “Tartaglia”, se enfrentaron a un duelo matemático. Un duelo al mejor de 30 problemas, planteados por cada contendiente y resueltos tras un plazo de 50 días, públicamente en la catedral de Bolonia. Estos retos públicos eran muy populares, el templo se llenaba y hasta se hacían apuestas.
El resultado fue de 30 de Tartaglia a 0 de Antonio María del Fiore.Tartaglia logró resolver todos los problemas; del Fiore no pudo dar respuesta a ninguno. Todos los problemas de del Fiore eran ecuaciones de tercer grado, pero Tartaglia tenía un arma secreta: conocía un método para resolver las ecuaciones cúbicas.
El segundo reto fue unos años más tarde, en 1548, en Milán, cuando Tartaglia se enfrentó a uno de los discípulos de Cardano, Ludovico Ferrari. El reto se dio en la iglesia de Santa María del Giardino, pero Tartaglia no se presentó y los jueces declararon vencedor al equipo de casa: Ferrari gana por abandono.
Un siglo y medio más tarde, a finales del siglo XVII encontramos unos duelos fratricidas y las primeras Olimpíadas matemáticas internacionales solo para expertos: los retos de los hermanos Bernoulli. El primero lo publica, Jacob Bernoulli, el mayor de los hermanos, en 1690 en la revista Acta Eruditorum y es muy simple de enunciado: encontrar la curva que se obtiene al dejar colgando una cuerda entre dos puntos situados a igual altura.
Pregunta
¿Cuál es la curva que se obtiene al dejar colgando una cuerda entre dos puntos situados a igual altura?Solución
La curva que se obtiene al dejar colgando una cuerda entre dos puntos es la curva catenaria. La que dibujan los puentes, usada por Gaudí en arcos y lámparas…Las respuestas movilizaron a los pesos pesados de la época. Dieron la respuesta correcta, Huygens, Leibniz y Johann Bernoulli, el hermano pequeño.