Supongo que ya sabéis que la semana ha sido dulce en los Estados Unidos. Hoy Europa se pelea por la últimas ofertas del Black Friday, pero allá, al otro lado, Thanksgiving ha calentado los hogares americanos desde los bosques de Maine hasta la soleada California.
Es una fiesta, el Acción de Gracias, muy ligada a la cultura y al deporte, al más puro estilo americano.
Prueben a acercarse a la novela de Richard Ford, Acción de gracias, la última de su trilogía y la más política de ellas… o a películas de todo pelaje, desde Hanna y sus Hermanas hasta La Tormenta de Hielo de Ang Lee.
Pero no nos pongamos tracendentes; porque si una obra refleja bien la cultura del Thanksgiving es un capítulo de Friends, el noveno de la tercera temporada, el de La Copa Geller.
El episodio empieza tranquilo y feliz; ellas cocinan el pavo mientras ellos ven el fútbol, americano, claro, en la tele del salón. El fútbol comparte la pantalla y la atención con el desfile de Macy’s por la Quinta Avenida, pero el fútbol suele ganar.
En fin, que la cosa se complica y acaban bajando a Central Park a jugar un partido de fútbol entre los seis amigos, chicos y chicas, tal y como Mónica y Ross hacían cuando eran niños: la famosa Copa Geller.
El acto es espontáneo pero nos da una foto del día en el país. Las familias salen al jardín después del pavo. Los hombres y los niños se unen en partidos con los vecinos a lo largo de la calle que atraviesa el vecindario. El honor en juego y la nostalgia por la familia y la niñez vuelve para hacer felices a los adultos. El balón ovalado yanki cruza el aire entre las casitas.
Cientos o miles de Copas Geller y millones de niños se pasaron el balón ayer por la tarde.
Mientras, los mayores abren botellas de cerveza y se entregan al partido de los Cowboys o de los Lions. Dallas y Detroit juegan siempre en el día de Acción de Gracias, como parte de la tradición. El norte del país anima u odia a Detroit, el sur va con o contra los gigantes de Dallas. Se programan partidos especiales de rivalidad regional para que las familias que vuelven a casa se reencuentren con sus raíces.
En 1863 Abraham Lincoln proclamó el tercer jueves de noviembre como la fiesta nacional más importante de los Estados Unidos, el Thanksgiving. Casi desde entonces el día y el país se levantan sobre tres pilares fundamentales: el pavo, el desfile de Macy’s y el fútbol americano.