Una semana más nuestro divulgador de cabecera, Mario Viciosa, nos acerca de forma sencilla al mundo de la ciencia. Hoy en Divulga que algo quedanos explica el porqué del mal de la sequía en España. Nuestro país es seco, pero este invierno va camino de ser del todo anómalo. Los embalses están al 44% y la lluvia de la semana pasada se ha quedado en un espejismo. ¿Qué está pasando?
La cuenca del río Guadalquivir está en sequía oficialmente desde noviembre. En lo que va de año hidrológico, ha caído casi la mitad de lo que debería. Cuando los periodos secos comienzan a ser recurrentes y prolongados podemos asegurar que todo apunta a cambio climático. Visto en el largo plazo, más que llover menos, llueve peor. Cae de golpe, de forma torrencial, destructiva y muy localizada. Y eso no es útil para llenar pantanos.
Aunque una DANA no es más que el término técnico para un tipo de borrasca que se produce bien arriba en el cielo. A veces es una bolsa de aire frío que puede causar esas gotas frías de lluvia torrencial y viento, pero otras veces no. La cuestión es que se dan a veces fuera de temporada y en lugares semiáridos. Y los modelos climáticos no apuntan a que esas lluvias tan fuertes vayan a servir para reverdecer la región. Al contrario, porque arrastran de todo y no favorecen el nacimiento y crecimiento vegetal.
El mal de la sequía
En los últimos diez años, lo que se ve es una anomalía de sur a norte, como en un eje del mal de la sequía, que se dibuja en el mapa peninsular como una línea vertical. Este modelo, desarrollado por el geógrafo del CSIC Dominic Royé, muestra una España rajada como por una línea gruesa de sequía más severa y frecuente de Jaén a la Sierra de Madrid. Con manchas secas más aisladas en Córdoba, el norte de Extremadura, el sur de Alicante, Mallorca y las Riberas navarras.
Los investigadores, Cramer y Guiot, hicieron en 2016 una especie de pronóstico del clima futuro y dijeron que vamos hacia una 'murcianización' de casi dos tercios de la península, es decir, a paisajes semiáridos hacia finales del siglo, si seguimos emitiendo la misma cantidad de CO2. El CO2 es parte de lo que sale de tubos de escape, factorías, aviones y de quemar carbón y gas para producir calor y electricidad.
Además Mario Viciosa nos resuelve la duda de la semana. ¿Por qué el valle del Guadalquivir es uno de los lugares habitados más calientes y secos de la Tierra? ¿Quieres saber la respuesta?