En 2022, Miguel Ángel Vicente, director de El Gastrónomo Zaragozano, tuvo la iniciativa de recuperar una variedad de tomate que se había dejado de plantar porque no resultaba rentable y era más complicado que otras variedades. Se trata de la variedad Zaragozano. Para llevar adelante la recuperación, se puso en contacto con la ingeniera agrónoma Cristina Mallor, quien se unió a la iniciativa.
En colaboración con el Banco de Semillas del CITA se plantaron ocho tipos de semillas de la variedad Zaragozano. En total fueron 1.200 semillas de las que 1.200 llegaron a buen término produciendo la planta de los tomates en la finca de José Luis Lorente, en Boquiñeni. Ahora se está haciendo un seguimiento de los diferentes tipos de semillas para ver cuál da la mejor planta y así continuar con su plantación en próximas temporadas.
De momento la producción es pequeña, por lo que sólo se va a poder degustar en establecimientos hosteleros de la capital, como El Candelas, donde se hizo la presentación. Miguel Ángel Vicente explica cómo se trata de un tomate muy dulce, con azúcar natural, con más sabor y más peso que otras variedades.