El pasado martes, 31 de agosto, José Ricardo Abad, un bombero de la Comunidad de Madrid de 48 años falleció en Hospital 12 de Octubre de Madrid tras haber pasado un mes ingresado por coronavirus. Abad, que se había negado a vacunarse contra el Covid-19, se han convertido en la primera víctima mortal del coronavirus en el Cuerpo de Bomberos de Madrid.
Los 1.400 bomberos que forman parte del Cuerpo de Bomberos de la Comunidad de Madrid habían sido llamados a vacunar en la primera fase del calendario de vacunación, ya que forman parte de los colectivos de riesgo, como los sanitarios o los policías.
Desde hace 21 años, Abad trabajaba como bombero en el parque 13 de Lozoyuela. Además, vivía en Alcalá de Henares y no estaba casado ni tenía hijos.
La Comunidad de Madrid ha confirmado que el fallecido rechazó recibir la vacuna contra el coronavirus, aunque no dio ninguna explicación por su negativa. Y aunque en varias ocasiones volvió a recibir la llamada de la Sanidad madrileña para ofrecerle una nueva cita, Abad lo volvió a rechazar.
Fue a principios de agosto cuando Abad empezó a notificar los síntomas del coronavirus y finalmente ingresó en el centro hospitalario, donde lo ingresaron unos días en la UCI. A partir de la tercera semana de agosto, comenzó a mejorar y fue llevado a planta, pero tras recaer de nuevo, fue trasladado de vuelta a la UCI, donde falleció el pasado 31 de agosto.
Así lo confirmaba en su cuenta de Twitter el 112 de la Comunidad de Madrid: "Una noticia muy triste para el cuerpo de Bomberos de la Comunidad de Madrid. Nos ha dejado José Ricardo Abad a los 48 años, bombero que prestaba servicio en el Parque 13 de Lozoyuela. Un fuerte abrazo para familiares, amigos y compañeros".