La asociación vecinal El Organillo, ha convocado una nueva cacerolada contra las denominadas terrazas COVID. Es la segunda acción de este tipo que convocan tras la del pasado 28 de octubre en la calle Ponzano. El motivo es el de protestar contra el ruido de las terrazas, el ocio nocturno y su invasión de espacios público con calles, plazas o aceras.
La portavoz socialista en el Ayuntamiento, Mar Espinar, ha acompañado a los vecinos en su reivindicación, y ha pedido que se les escuche y hasta que no se haga, su grupo no va a parar. Ha definido como caos lo que sucede con las terrazas en Madrid y ha pedido que se cierren el próximo 31 de diciembre.
La del jueves es la tercera protesta tras la de Ponzano y una en Plaza de la Villa. "Mientras no veamos al camión del Ayuntamiento llevarse las terrazas ilegales y veamos que se desmontan las terrazas que se permitieron por la pandemia, seguiremos reivindicando en la calle, en los tribunales y hasta donde nos lleguen las fuerzas, que se retiren las terrazas", señala la asociación que recalcan que tienen pocos motivos para creer en que se cumpla el fin de las licencias concedidas por las pandemias, fecha fijada el 31 de diciembre.
"El próximo jueves vamos a decirle alto y claro a la Sra. Begoña Villacís que no se puede regalar el espacio público, que las terrazas COVID no pueden perpetuarse a costa de nuestra salud", señalan en sus redes sociales.
