Las kcal, o kilocalorías, son una medida de la energía que contiene un alimento. En el contexto de la nutrición, se utilizan para indicar cuánta energía proporciona un alimento cuando se metaboliza. Explicado de forma breve, el cuerpo utiliza esa energía para realizar diversas funciones como mantener la temperatura corporal, llevar a cabo actividades físicas y mantener el funcionamiento de los órganos internos.
En este sentido, hay ciertos alimentos que pueden proporcionar una gran cantidad de energía en forma de kilocalorías. Tal es el caso de los huevos que además son una fuente de proteínas, grasas saludables, vitaminas y minerales. De hecho, la Fundación Española del Corazón recomienda ingerir de tres a cinco huevos a la semana, aunque si se tienen niveles altos de colesterol en sangre, recomienda reducir su ingesta a 2-3 huevos semanales.
El número exacto de kilocalorías en un huevo puede variar según su tamaño y, por supuesto, por la forma en que se cocina. Sin embargo, en promedio, un huevo grande (alrededor de 50 gramos) cocido aporta aproximadamente 70 kcal. Esto puede variar ligeramente dependiendo de factores como si se cocina con aceite, mantequilla u otros ingredientes adicionales.
Por lo tanto, un huevo frito tiende a tener más calorías que un huevo cocido. El aceite o la mantequilla añaden calorías adicionales al huevo. Por contra, un huevo cocido no contiene estas calorías adicionales, ya que se cocina en agua sin añadir grasa extra.
La cantidad exacta de kcal que se añaden a un huevo al freírlo es difícil de calcular, puesto que dependerá de varios factores, incluyendo la cantidad de aceite utilizada y la absorción de dicho aceite por parte del huevo durante la cocción.
Como referencia general, se estima que una cucharada de aceite (aproximadamente 14 gramos) contiene alrededor de 120 kcal. Si freímos un huevo en una cantidad moderada de aceite, digamos una o dos cucharadas, podríamos agregar aproximadamente 120 a 240 kcal adicionales a las 70 kcal que ya contiene el huevo.
Características nutricionales del huevo
- Cuentan con proteínas de muy buena calidad y de alto valor biológico. También incluye vitaminas de los grupos A y B. Además, contiene minerales entre los que destaca el hierro, cuyo origen animal permite una fácil absorción.
- La clara está compuesta fundamentalmente por albúmina, la proteína de mayor calidad biológica. Para que se pueda aprovechar completamente la clara del huevo hay que cocerla, ya que contiene algunos antinutrientes (avidina y ovomucoide) que se inactivan con el calor.
- La yema contiene grasa (lecitina), proteínas, hierro, azufre y vitaminas A, B, D y E. Es rica en grasa y colesterol.
