Si hablamos de Suiza, hay dos productos que vienen a nuestra mente: el queso y el chocolate. Manuel Barranco, Chef Manolito, nos descubre cómo los quesos gruyer, emmental o appenzeller son los grandes protagonistas. Y los más utilizados para realizar foundues con la mezcla de todos ellos.
La raclette es otra forma muy tradicional de comer los quesos, colocándolo junto a la estufa y comiéndose la zona que queda tostada. Otro de los platos muy tradicionales es el rösti suizo. Es como una tortilla de patata sin huevo en la que se cuece la patata, se pasa por el rallador, se le añade cebolla, orégano y se tuesta.
En salado también está muy extendido un plato que consiste en hojas de acelgas rellenas de una masa de harina y huevo y a la que se le puede añadir jamón de york o bacon. Y en cuanto a la carne, es tradicional el Estronov, un guiso de ternera acompañado de una salsa con nata, cebolla, vino blanco y setas.
Y no se pueden ir de Suiza sin probar el chocolate en todas sus variedades, pero sin duda, con las bajas temperaturas, lo que apetece es un chocolate suizo tradicional. Es un chocolate a la taza, con un 70% de cacao deshecho en nata y leche y un toque de azúcar. Servido con un poco de nata semimontada y cacao espolvoreado.