Túnez es un país con gastronomía mediterránea por lo que las aceitunas, los pimientos y el aceite son algunos de los ingredientes estrella, a los que también se le añade la almendra y la miel. Con algunos de ellos, Manuel Barranco, Chef Manolito, nos descubre la riqueza de la cocina tunecina.
Algo que no falta en ningún momento del día es el té de menta y con piñones. Apetecible en cualquier época del año porque, por lo que pueda parecer, resulta muy refrescante. Como entrantes y aprovechando los productos más habituales, son tradicionales las ensaladas. Muchas de ellas elaboradas con zanahoria rallada o en puré a la que se le añaden especias, huevo duro, queso feta o incluso atún salado muy similar a la mojama que se consume en España.
Respecto a los salados, Chef Manolito destaca también cómo suelen salar otros productos como el pulpo, que lo dejan salar con la brisa marina, lo que le da un toque especial de sabor y de secado. El pulpo se consumo así, seco, o guisado, pero en ambos casos lo acompañan con cuscús.
Otros producto que se utiliza mucho en la gastronomía tunecina es la pasta brie. Con ella no sólo se elaboran postres sino también platos como los “dedos de Fátima”, una especie de rollitos rellenos de carne picada y cocinada con especies. O incluso elaboran una especie de empanadilla en el que ponen una pase de patata cocida, pimientos y sobre esta cama un huevo. Se mete al horno y listo para comer.
Guisos con cordero o ternera también son muy habituales y si piden un “tajin”, no imaginen un guiso realizado en un recipiente de barro como en Marruecos, se trata de una especie de quiché. Postres como los batidos de dátiles o los “cuernos de gacela” completan algunas de las propuestas de Chef Manolito.